No es fácil entender a un hincha de Racing.
El hincha de Racing llora de alegría porque le ganó 1 a 0 a Arsenal.
-"Pero no es cualquier partido!! Hacía 9 que no ganaba!!!"
Y al hincha de Racing no le importa que pierda. Sigue yendo a ver a su equipo, aunque ya sepa que está mal, que no le puede hacer un gol a nadie... igual va, igual dice "esta fecha ganamos"... y cuando finalmente gana, llora.
El hincha de Racing lo último que pierde es la esperanza. Es hasta envidiable esa perseverancia.
Mi abuelo materno, mi abuela paterna, mi viejo, mi tío, mis hermanos... todos hinchas de Racing... y obvio, yo también... mucha opción no me quedaba, no??
A los 3, ya estaba a "cococho" de mi viejo, yendo a la platea del Cilíndro de Avellaneda.
Como era muy chiquita y todavía no entendía mucho qué era todo eso, me dedicaba a juntar los papelitos que tiraba la gente cuando salía el equipo. Eran boletas viejas de "Prode"... juntaba montones de papelitos, y cuando volvía a casa, jugaba a adivinar los resultados de esos partidos viejos...
Todavía recuerdo también la camiseta que usaba siempre, para ir al colegio y hasta para dormir. Era de mi hermano esa camiseta, pero cuando le quedó chica, la heredé. Era simplemente Celeste y blanca, de piqué, manga corta, sin publicidades... Como en los 80's... y con el 9 en la espalda.
En mi cuarto, allá por el '88 aprox, colgaba de la puerta del placard el poster de Rubén Paz abrazado a Walter Fernández... y al lado, uno de Medina Bello... jajajaja qué épocas!!!
Entrada en la adolescencia, me volví una ferviente fanática. Siempre que podía, iba a la cancha con mi viejo y mi hermano. No más platea. Ya ibamos a la "popu", cerca del corner. Tengo recuerdos de un montón de partidos, aunque no así de los resultados.
Una vez, me encontré a
Diego Capussotto en la cancha. Pocas veces me divertí tanto viendo un partido de Racing. Escuché los insultos más graciosos que se le puede decir a un árbitro.
Y no me importaba si perdía Racing. Yo iba a la cancha. Por gusto, y por seguir a mi equipo.
Ahí entendí lo que es ser Hincha de Racing. Perder un partido sobre la hora, sufrir hasta el último minuto para que se dé UN resultado... siempre remando... y si perdía, ya se pensaba en quién venía la próxima fecha, y "al que viene le ganamos"... siempre optimista... (optimista incluso sabiendo que Blanquiceleste S.A le debe U$S1.865.832,55 a Héctor Daniel Lalin)
No se si es terquedad o masoquismo, pero soy de Racing.
